Dentro de las maderas hay mucha variedad y cada una tiene su peculiaridad, sabiendo como son cada una y aprovechando su características, se pueden llegar a conseguir interiorismos únicos.
Es el caso de la madera de bambú, aprovechando su elasticidad, se pueden incluir en forrados que necesitan curvarse y adaptarse a la perfección a las paredes
En este colegio de Madrid, el interiorismo quería ofrecer un espacio cálido y confortable para los alumnos y optaron por el uso del paneleado de las maderas de bambú.
Las paredes del este colegio, son curvas en sus pasillos y este material se adapta por completo. Para el diseño se buscaba continuidad en todas sus paredes y por ello las puertas de paso, armario y registros existentes en los pasillos comunes, se revisten de bambú, de forma que cuando esté todo cerrado, se proyecta un largo pasillo de madera.
La iluminación focal consecutiva, ayuda a pronunciar la madera y crear una textura como si te encontraras en un verdadero bosque de bambú.
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