Esta vivienda tenia un reto, consistía en renovar una casa construida en 1918, manteniendo el volumen y la fachada original al tiempo que mejoraba el confort térmico y acústico. Los sistemas constructivos y materiales empleados han hecho posible no sólo para lograr la meta , sino también para reducir la demanda de energía en sólo 120 días, con las tres dificultades existentes: la orientación norte- este de la casa, el presupuesto limitado y la urgencia de los clientes para entrar a vivir.
Un sistema de construcción en seco prefabricado fue elegido para lograr la máxima precisión y acortar el proceso de construcción . Los diferentes elementos ( tejado, fachada , entresuelo, escalera , claro) fueron diseñados como piezas de Meccano para ser fabricados con un sistema de control numérico y posteriormente se reunieron en el sitio. Todo el techo se montó en pocas horas, al igual que otros elementos.
Además, se utilizaron materiales bio con el fin de reducir el impacto medioambiental . Por lo tanto , el nuevo tejado y la fachada fueron construidos fuera de un sistema de construcción con estructura de madera estructural utilizando paneles OSB, lana natural de oveja y tableros de fibra de madera para el aislamiento . La fachada ventilada tiene un acabado de tablones de madera de arce natural y el techo con madera de pino con tratamiento térmico . En el interior, el entresuelo, la cocina y los armarios son totalmente fabricados de tres láminas de paneles y linóleo para el suelo . La casa está dotada de paneles solares para calentar el agua y un dispositivo de alta eficiencia energética para la ventilación.
Toda la información y mas imágenes en: http://www.archdaily.com/311107/
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